Este mes de abril empezó la campaña de la renta y, como en cualquier ejercicio, uno de los aspectos que genera más dudas a la hora de realizar este trámite es la declaración de la vivienda. Tanto propietarios como inquilinos deben conocer las obligaciones fiscales que conlleva tener una vivienda en propiedad o alquiler.
La declaración de la renta para propietarios de viviendas incluye los siguientes aspectos:
- Es necesario declarar el valor catastral de la propiedad, y los ingresos obtenidos por alquiler o por su uso, en caso de haber sido alquilada temporalmente durante el ejercicio fiscal.
- Si se ha adquirido una vivienda durante el año fiscal, se deben incluir en la declaración de la renta el importe pagado por la compra y los gastos e impuestos asociados a la adquisición.
- Es importante tener en cuenta que los gastos deducibles relacionados con la vivienda habitual, como los intereses de la hipoteca o los gastos de comunidad, pueden estar limitados según la normativa fiscal del país correspondiente. Por tanto, es recomendable buscar asesoramiento de un experto para conocer la regulación aplicable en cada caso.
Vivienda en alquiler
Es esencial tener en cuenta que declarar una vivienda en alquiler tiene ventajas fiscales tanto para los propietarios como para los inquilinos, y también otorga una protección legal a ambas partes en caso de problemas en el arrendamiento.
Si tienes una propiedad en alquiler que se utiliza como vivienda habitual, debes declararlo en la declaración de la renta. Sin embargo, solo aquellos que obtengan ingresos íntegros superiores a 1.600 euros deberán declararlos como “rendimientos de capital inmobiliario”. Los propietarios podrán realizar una deducción del 60% del rendimiento junto con los gastos asociados, como impuestos del inmueble, suministros e hipoteca.
En cuanto a los inquilinos, no están obligados a declarar la vivienda en la renta. Sin embargo, es esencial guardar los recibos y otros documentos que justifiquen el pago del alquiler, ya que podrían ser requeridos por la Agencia Tributaria.
Por último, si un inquilino realiza mejoras en la vivienda arrendada, como la instalación de un sistema de climatización o la reforma de la cocina, podrá aplicar una deducción por inversión en la vivienda que le permitirá reducir la cantidad de impuestos que debe pagar en la renta.
